Xóchitl Gálvez Propone Apertura del Sector Energético Privado Ante Crisis Eléctrica en México

Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la oposición, planteó el 8 de mayo la necesidad de abrir el sector energético a la inversión privada, en respuesta a los apagones masivos que afectaron a gran parte de México esta semana.

Su llamado se da después de que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) declarara una emergencia en el sistema eléctrico tras el colapso de las redes de transmisión el martes.

“Tenemos un problema serio. Debemos permitir mayor participación del sector privado y construir más líneas de transmisión. De lo contrario, será difícil impulsar el crecimiento económico”, dijo Gálvez, representante de la coalición Fuerza y Corazón por México, durante un foro en la Ciudad de México.

Gálvez sugirió varias acciones para mejorar el sistema eléctrico, como la construcción de una línea de transmisión desde el Istmo de Tehuantepec hasta el centro del país, además de la reactivación de proyectos privados para generar energía.

La noche del martes, Gálvez cuestionó en sus redes sociales si los apagones eran resultado de una “emergencia nacional o negligencia criminal”. Además, prometió que su gobierno garantizaría energía limpia, barata y suficiente.

Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador justificó los apagones como un caso “excepcional”, debido a la intensa ola de calor que ha afectado a 22 estados del país, algunos con temperaturas superiores a los 45 grados.

Sin embargo, el gobierno de López Obrador ha sido criticado por implementar políticas que favorecen a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), obstaculizando la inversión privada en energía renovable, lo que, según la oposición y empresarios, ha contribuido a la crisis eléctrica.

México se prepara para una histórica jornada electoral el próximo 2 de junio, con más de 98 millones de ciudadanos llamados a votar para más de 20 mil cargos de elección popular, incluyendo la Presidencia, el Congreso y nueve gobiernos estatales.

Pemex Incrementa su Deuda con Proveedores y sus Ganancias se Desploman

En un panorama económico desafiante, Petróleos Mexicanos (Pemex) enfrenta un complicado inicio de 2024 con un aumento del 44% en su deuda con proveedores, ascendiendo a 8 mil millones de dólares. Este incremento se suma a los retos financieros ya existentes, como el aumento de gastos operativos y la disminución del margen de utilidades.

El reporte presentado por Pemex revela que sus pasivos con proveedores y contratistas han crecido significativamente, alcanzando la cifra de 139 mil 115 millones de pesos de octubre de 2023 a febrero de 2024. Además, el informe destaca obligaciones facturadas por 138 mil 845 millones de pesos y pendientes de facturar por 270 millones de pesos al cierre de febrero.

En un intento por abordar la situación, Pemex ha realizado pagos por un total de 86 mil 930 millones de pesos en los primeros dos meses de 2024, aunque en 2023 había cubierto una suma más considerable de 382 mil 895 millones de pesos. A pesar de recibir inyecciones financieras del gobierno federal por 1.6 billones de pesos en los últimos años, la empresa ha experimentado una disminución del 10% en sus utilidades en 2023 en comparación con 2022.

La reducción en las ganancias se suma a los crecientes gastos operativos, que en los últimos 12 meses aumentaron en un 35.7%, alcanzando un récord de 228 mil 220 millones de pesos, equivalente al 13.3% de las ventas de la compañía. La producción de petrolíferos también experimentó una caída del 2%, llegando a 896 mil 546 barriles diarios, mientras que la extracción de crudo apenas se elevó un 5.1%.

Sin embargo, en medio de estas cifras preocupantes, Pemex muestra un atisbo de mejoría al informar una reducción del 61% en su deuda con proveedores desde diciembre de 2023.

Esta disminución, aunque alentadora, surge en un contexto en el que la empresa ha enfrentado dificultades para cumplir con sus obligaciones financieras, generando inquietud sobre la producción y la viabilidad de las compañías asociadas.

Se informa que Pemex destinó aproximadamente 6,400 millones de dólares de un reciente crédito fiscal para abonar a las deudas con proveedores, en un esfuerzo por estabilizar las operaciones y mantener la producción. Aunque la empresa ha priorizado pagos a grandes empresas de servicios petroleros, se espera que la transparencia sobre montos pendientes y tiempos de liquidación total se clarifique en futuras comunicaciones.

A pesar de los desafíos actuales, los esfuerzos de Pemex para reducir su deuda con proveedores señalan una dirección positiva hacia la recuperación financiera y la normalización de sus relaciones comerciales. La situación financiera de Pemex será vigilada de cerca por actores del mercado y el sector energético, ya que la estabilidad y recuperación de la empresa son cruciales para la economía mexicana.