Las comisiones de Energía y de Estudios Legislativos del Senado aprobaron un decreto que impulsa cambios fundamentales en el sector energético de México. Con 22 votos a favor, uno en contra y ocho abstenciones, el dictamen ahora será discutido por el pleno de la Cámara Alta, con una posible votación programada para este miércoles.
La iniciativa, presentada por la presidenta Claudia Sheinbaum, busca fortalecer las empresas públicas del Estado, proporcionar certeza a agentes privados y mejorar la regulación del sector desde un enfoque técnico. Además, se pretende establecer un marco jurídico claro para la transición energética y los sectores eléctrico e hidrocarburos.
De acuerdo con el decreto, la reforma permitirá que México recupere el control de su sector energético, priorizando la seguridad nacional, el bienestar de la población y la sustentabilidad de los recursos. Para lograr estos objetivos, se expedirán ocho nuevas leyes y se reformarán tres normativas vigentes.
Las nuevas leyes incluyen la Ley de la Empresa Pública del Estado para la Comisión Federal de Electricidad, la Ley de la Empresa Pública del Estado para Petróleos Mexicanos, la Ley del Sector Eléctrico, la Ley del Sector Hidrocarburos, la Ley de Planeación y Transición Energética, la Ley de Biocombustibles, la Ley de Geotermia y la Ley de la Comisión Nacional de Energía.
Asimismo, se proponen modificaciones a la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo, la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos.
Durante la discusión, legisladores de los partidos PAN, PRI y MC pidieron que las leyes y reformas fueran votadas de manera separada en lugar de un solo bloque. Ante la negativa de esta solicitud, optaron por abstenerse y anunciaron que insistirán en su petición durante la votación en el pleno.
Este debate es crucial para el futuro del sector energético del país, pues su aprobación podría redefinir el papel del Estado en la gestión de los recursos energéticos, así como el nivel de participación de las empresas privadas. Se espera que en los próximos días continúen las discusiones y que el Senado tome una decisión definitiva sobre esta reforma estructural.