Pemex Incrementa su Deuda con Proveedores y sus Ganancias se Desploman

En un panorama económico desafiante, Petróleos Mexicanos (Pemex) enfrenta un complicado inicio de 2024 con un aumento del 44% en su deuda con proveedores, ascendiendo a 8 mil millones de dólares. Este incremento se suma a los retos financieros ya existentes, como el aumento de gastos operativos y la disminución del margen de utilidades.

El reporte presentado por Pemex revela que sus pasivos con proveedores y contratistas han crecido significativamente, alcanzando la cifra de 139 mil 115 millones de pesos de octubre de 2023 a febrero de 2024. Además, el informe destaca obligaciones facturadas por 138 mil 845 millones de pesos y pendientes de facturar por 270 millones de pesos al cierre de febrero.

En un intento por abordar la situación, Pemex ha realizado pagos por un total de 86 mil 930 millones de pesos en los primeros dos meses de 2024, aunque en 2023 había cubierto una suma más considerable de 382 mil 895 millones de pesos. A pesar de recibir inyecciones financieras del gobierno federal por 1.6 billones de pesos en los últimos años, la empresa ha experimentado una disminución del 10% en sus utilidades en 2023 en comparación con 2022.

La reducción en las ganancias se suma a los crecientes gastos operativos, que en los últimos 12 meses aumentaron en un 35.7%, alcanzando un récord de 228 mil 220 millones de pesos, equivalente al 13.3% de las ventas de la compañía. La producción de petrolíferos también experimentó una caída del 2%, llegando a 896 mil 546 barriles diarios, mientras que la extracción de crudo apenas se elevó un 5.1%.

Sin embargo, en medio de estas cifras preocupantes, Pemex muestra un atisbo de mejoría al informar una reducción del 61% en su deuda con proveedores desde diciembre de 2023.

Esta disminución, aunque alentadora, surge en un contexto en el que la empresa ha enfrentado dificultades para cumplir con sus obligaciones financieras, generando inquietud sobre la producción y la viabilidad de las compañías asociadas.

Se informa que Pemex destinó aproximadamente 6,400 millones de dólares de un reciente crédito fiscal para abonar a las deudas con proveedores, en un esfuerzo por estabilizar las operaciones y mantener la producción. Aunque la empresa ha priorizado pagos a grandes empresas de servicios petroleros, se espera que la transparencia sobre montos pendientes y tiempos de liquidación total se clarifique en futuras comunicaciones.

A pesar de los desafíos actuales, los esfuerzos de Pemex para reducir su deuda con proveedores señalan una dirección positiva hacia la recuperación financiera y la normalización de sus relaciones comerciales. La situación financiera de Pemex será vigilada de cerca por actores del mercado y el sector energético, ya que la estabilidad y recuperación de la empresa son cruciales para la economía mexicana.

Inflación en México con una Aceleración Persistente durante el Comienzo del 2024

En un inicio de año marcado por incertidumbres económicas, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que la inflación en México ha alcanzado un 4.90% anual en la primera quincena de enero de 2024, registrando así el nivel más alto de los últimos 13 periodos quincenales. Este incremento, que supera las expectativas del mercado, se suma a una tendencia que ya se mantenía en las últimas cinco quincenas.

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) experimentó una variación del 0.49% respecto a la quincena anterior, contribuyendo al alza de la inflación en comparación con el mismo periodo del año anterior, donde la cifra era de 7.94%. Para obtener un mejor análisis, se examinaron dos componentes principales del INPC: el índice de precios subyacente y el índice de precios no subyacente.

El índice de precios subyacente, considerado más confiable para medir la carestía general al eliminar la volatilidad de ciertos productos, presentó un aumento del 0.25% a tasa quincenal y del 4.78% a tasa anual. Mientras tanto, el índice de precios no subyacente registró un crecimiento más pronunciado, con un 1.22% quincenal y un 5.24% anual.

En el desglose del índice subyacente, los precios de las mercancías y servicios aumentaron un 0.26% y 0.24%, respectivamente, a tasa quincenal. En el índice no subyacente, los productos agropecuarios fueron los principales impulsores con un incremento del 2.42% quincenal, mientras que los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno mostraron un aumento más moderado del 0.15%.

Una mirada más cercana a la canasta de consumo mínimo, que comprende 176 productos y servicios, revela un aumento del 0.63% quincenal y del 4.78% a tasa anual. Aunque estas cifras son menores en comparación con el mismo periodo del año anterior, donde la inflación quincenal fue del 0.50% y la anual del 8.56%, aún reflejan una presión constante sobre los precios.

La tasa de inflación mexicana cerró el año 2023 en un 4.66%, superando las expectativas del mercado y marcando un repunte de los precios en el último bimestre. Aunque este dato está por debajo del 7.82% anual de 2022, el mayor nivel para un fin de año en 22 años, y de los primeros cinco meses del siglo, es el más alto de los últimos cinco meses.

La persistente aceleración de la inflación ha sido notoria, colocándose por encima de las estimaciones del consenso de analistas que pronosticaron un 4.78% anual. Esta tendencia al alza, que ya ha continuado por cinco quincenas, sugiere una lenta trayectoria a la baja en la inflación a lo largo del año, con riesgos adicionales vinculados a condiciones climáticas adversas y la evolución del salario mínimo.

La inflación del inicio de 2024 ha superado las proyecciones del mercado, demostrando que la economía mexicana enfrenta desafíos persistentes. Las políticas monetarias y fiscales deberán ser evaluadas cuidadosamente para abordar este escenario y garantizar la estabilidad económica en el país.