La inauguración de la Línea 3 del Cablebús en la Ciudad de México, que conecta Los Pinos con Vasco de Quiroga, prometía ser un evento de celebración y avance en la movilidad urbana. Sin embargo, la alegría del momento se vio empañada por la protesta de un grupo de padres de familia de la escuela primaria “El Pipila”, quienes exigieron la finalización de las obras de mitigación que afectan a sus hijos.
Durante la ceremonia, que contó con la presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, la presidenta electa Claudia Sheinbaum y el jefe de Gobierno Martí Batres, los padres hicieron sentir su descontento al señalar que las obras en la escuela no solo están incompletas, sino que también presentan condiciones inseguras. Mariana González, madre de uno de los alumnos, destacó que “hay jardineras sin terminar y restos de materiales aventados en las instalaciones”, lo que representa un riesgo para los niños.
La protesta no pasó desapercibida, y miembros del equipo de la Jefatura de Gobierno se acercaron a los manifestantes para dialogar. Aunque les pidieron que guardaran sus carteles y ofrecieron tomar sus datos para resolver el conflicto, muchos sintieron que su voz estaba siendo ignorada mientras las autoridades se centraban en firmar libros y tomarse fotos con los asistentes.
La escuela “El Pipila” alberga una de las torres que sostiene el cable del nuevo sistema de transporte. En el marco de las obras, se llevaron a cabo rehabilitaciones en las áreas de juegos, así como la construcción de canchas deportivas y arcotechos para proporcionar sombra a los estudiantes. Sin embargo, los padres se sienten frustrados ante el avance de estas obras, que, según el secretario de Movilidad, Andrés Lajous, aún tienen “pendientes” que se espera concluir hasta noviembre. No obstante, el informe presentado ante el Congreso Capitalino no especifica qué exactamente falta para finalizar el proyecto.
Por su parte, el secretario de Obras, Jesús Esteva, trató de minimizar las preocupaciones al afirmar que solo se trata de “detalles” que están pendientes. “Ya están todas las certificaciones de seguridad estructural y vistos buenos de seguridad y operación”, aseguró en una entrevista tras la inauguración. Sin embargo, la tranquilidad que estas palabras buscan transmitir contrasta con la preocupación palpable de los padres, quienes desean ver condiciones seguras y adecuadas para sus hijos en la escuela.
La Línea 3 del Cablebús cuenta con siete estaciones y promete revolucionar la movilidad en la zona, con un costo de solo siete pesos por viaje. Sin embargo, la satisfacción de los usuarios potenciales podría verse afectada si se ignoran las necesidades de la comunidad escolar que está en las inmediaciones de una de las estaciones.
La protesta durante la inauguración no solo pone de manifiesto las tensiones que a menudo surgen en proyectos de infraestructura, sino que también resalta la importancia de involucrar a las comunidades afectadas en el proceso de planificación y ejecución de tales obras. Con el desafío de equilibrar el avance urbano y la seguridad de los ciudadanos, las autoridades tienen la responsabilidad de atender estas demandas antes de que se conviertan en un problema mayor.
A medida que se desarrollan estos eventos, la pregunta persiste: ¿cómo se pueden asegurar condiciones adecuadas para todos los ciudadanos mientras se impulsa el desarrollo de una ciudad en constante evolución? Las respuestas a este interrogante son más necesarias que nunca en un contexto donde la voz de la comunidad no puede ser ignorada.
Es importante destacar que este medio de transporte público, que promete ser seguro y accesible, también busca disminuir tiempos de traslados. Estará formado por las siguientes estaciones:
- Vasco de Quiroga
- Cineteca Nacional Bodega de Arte
- Pracur, colegio de arquitectos
- Charrería
- Panteón de Dolores
- Los Pinos Constituyentes
Va a conectarse con otros sistemas de transporte como la estación Constituyentes del Metro, y con el Tren Interurbano. La forma de pago será con la tarjeta de movilidad integrada. Lo mejor de todo es que va a reducir los tiempos de traslado, de 45 a 21 minutos de Vasco de Quiroga a Metro Constituyentes y viceversa.
El horario de servicio de la Línea 3 del Cablebús será de lunes a viernes de 05:00 a 23:00 horas, los sábados de 06:00 a 23:00 horas y los domingos de 07:00 a 23:00 horas. Se podrán transportar hasta 10 personas por cabina, por lo que al día se estima que se trasladen hasta 36 mil pasajeros. Cada pasaje tendrá un costo de $7 pesos.