Sinaloa está recibiendo un nuevo impulso en la lucha contra la inseguridad con la llegada de 590 elementos de la Guardia Nacional (GN). Así lo anunció este viernes el gobernador Rubén Rocha Moya durante la ceremonia de cambio de mando de la Tercera Región Militar, en la que Guillermo Briseño Lobera asumió el liderazgo por órdenes de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
El gobernador expresó su esperanza en estos refuerzos, destacando la necesidad de mayor presencia y apoyo militar para controlar la violencia en el estado. “Esperamos que nos ayuden”, señaló Rocha Moya a los medios de comunicación, en referencia a los nuevos efectivos que colaborarán con el Ejército, la Fuerza Aérea y la Marina en los operativos de seguridad que se implementan en la zona centro de Sinaloa desde el mes pasado.
Rocha Moya aprovechó la ocasión para agradecer el esfuerzo conjunto de las distintas fuerzas de seguridad que trabajan en el estado, desde la Guardia Nacional hasta la Policía Estatal, destacando su labor en el “resguardo de la seguridad y la proximidad ciudadana”. A pesar de los avances, el gobernador reconoció que todavía queda mucho por hacer: “Están muy coordinados trabajando y esto nos ha ayudado a que vayamos reduciendo, no acabando todavía, lamentablemente no podemos decir eso que ya esté concluido”, afirmó.
En otro movimiento clave, Rocha Moya anunció en sus redes sociales que se reunirá mañana con Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), para continuar afinando las estrategias de seguridad en la capital. Este encuentro, según el gobernador, será crucial para avanzar en los trabajos de protección y prevención que buscan reducir la violencia en Sinaloa.
Sinaloa, una de las regiones más afectadas por el crimen organizado en México, ha estado bajo el foco de las autoridades federales en los últimos meses. Los refuerzos enviados por la GN y la coordinación con la Fuerza Aérea y la Marina buscan fortalecer los operativos ya en marcha. A pesar de los esfuerzos, Rocha Moya admite que aún no se puede cantar victoria en la lucha contra la inseguridad, pero el despliegue de 590 elementos representa un paso importante en esa dirección.
Con este despliegue, las expectativas son altas, y los sinaloenses esperan ver resultados en los próximos meses. El gobernador Rocha Moya ha dejado claro que la seguridad es una prioridad en su administración, y la colaboración con el gobierno federal sigue siendo clave para enfrentar los retos que esta situación presenta. “Este esfuerzo conjunto es un compromiso con nuestra gente”, concluyó Rocha Moya.