El Instituto Nacional Electoral (INE) ha enviado a la Sala Superior del Tribunal Electoral ocho juicios relacionados con la elección presidencial, junto con informes que avalan la constitucionalidad y legalidad del proceso.
Entre los juicios presentados se encuentran cinco para la Protección de los Derechos Político-Electorales (JDC), interpuestos por Xóchitl Gálvez y cuatro ciudadanos adicionales. Además, se incluyen tres juicios de inconformidad: uno del Partido Revolucionario Institucional (PRI), otro de la Coalición Fuerza y Corazón por México, y uno más de la ciudadana Enriqueta Flores.
Estos recursos, conforme a la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación en Materia Electoral, permiten denunciar posibles violaciones a los derechos político-electorales, incluyendo el derecho a votar y ser votado, ya sea por ciudadanos individuales o sus representantes legales.
Los juicios de inconformidad buscan asegurar la validez y legalidad de los resultados electorales para la Presidencia de la República, senadurías y diputaciones. Mediante estos juicios, los partidos políticos pueden cuestionar los resultados por errores aritméticos, nulidades en casillas, falta de instalación de casillas, o inelegibilidad de candidatos.
La Sala Superior del TEPJF tiene la autoridad para resolver, de manera definitiva e inapelable, las disputas que surjan de los juicios de inconformidad contra los cómputos distritales de la elección presidencial.
Hasta la fecha, el Sistema Integral de Medios de Impugnación registra 241 juicios de inconformidad contra los cómputos distritales de la elección presidencial, 517 relacionados con la elección de diputaciones y 405 sobre la elección de senadurías.