Ley de Telecomunicaciones en pausa: Se abre el diálogo para construir una reforma sin censura

En un movimiento que promete abrir el debate y reducir tensiones, el Senado ha decidido aplazar la votación del dictamen de la nueva Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión. La iniciativa, que ha generado atención nacional por su posible impacto en la libertad de expresión y el acceso a medios, será revisada con mayor amplitud antes de llegar al pleno.

El presidente de la Comisión de Radio y Televisión del Senado, José Antonio Álvarez Lima, respaldó públicamente la solicitud de la presidenta Claudia Sheinbaum de frenar la aprobación inmediata y abrir un espacio para el análisis. En línea con esta postura, el legislador anunció que el Grupo Parlamentario de Morena se reunirá en los próximos días para atender la propuesta presidencial.

“La propuesta de la presidenta es atendible”, señaló Álvarez Lima, quien recalcó que no hay intención alguna de imponer censura. Afirmó que el proceso legislativo está apenas comenzando y que existe apertura total para escuchar y tomar en cuenta a empresarios, periodistas, académicos, técnicos y especialistas.

Uno de los puntos más controvertidos de la iniciativa es el artículo 109, que ha sido interpretado por algunos sectores como una herramienta para limitar el contenido en redes y plataformas digitales. Sin embargo, tanto Sheinbaum como los legisladores de Morena han reiterado que no se busca controlar ni censurar, sino garantizar una regulación justa y acorde con los tiempos actuales.

La senadora Guadalupe Chavira, secretaria de la Comisión de Estudios Legislativos, reafirmó que la Cuarta Transformación no censura a nadie y destacó la importancia de revisar el articulado en conjunto con los sectores involucrados. También subrayó que el Estado debe recuperar la rectoría sobre las telecomunicaciones, especialmente en lo referente a contenidos extranjeros con propaganda discriminatoria.

Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado, calificó como sensata la decisión de abrir el debate. Recalcó que se trata de un ejercicio de prudencia y equilibrio por parte de la presidenta, y reconoció la posibilidad de discutir la reforma en un periodo extraordinario si no se logra consenso antes del cierre del actual periodo legislativo.

La iniciativa busca corregir vacíos heredados de reformas anteriores, conocidas como la “ley Televisa”, y se propone ampliar la conectividad a regiones marginadas, defender los derechos de las audiencias y evitar que intereses extranjeros afecten la identidad y dignidad de la sociedad mexicana.

Morena ha dejado claro que seguirá abierta al diálogo. La idea no es imponer, sino construir una ley sólida y representativa. Así, el Senado pone el freno de mano y abre la puerta a una discusión incluyente, sin prisas, pero con paso firme hacia una legislación que refleje los valores democráticos de la nación.