Un derrame de hidrocarburos de Petróleos Mexicanos (Pemex) ocurrido en el municipio de Álamo, en el norte de Veracruz, se extendió hasta el río Tuxpan, provocando preocupación entre los habitantes de la zona por el posible daño ambiental. Aunque la empresa aseguró que la fuga fue controlada y que el alcance fue de ocho kilómetros, pobladores y usuarios en redes sociales reportaron que la mancha del hidrocarburo continúa expandiéndose sin control y podría superar los 15 kilómetros.
De acuerdo con Pemex, tras detectar la fuga, se activaron de inmediato los protocolos de contención y saneamiento en coordinación con la Secretaría de Marina (Semar), la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), así como autoridades locales y estatales. La empresa informó que se instalaron barreras de contención, cordones oleofílicos y equipos de bombeo y recolección superficial en el río Pantepec, con el objetivo de evitar el avance del hidrocarburo hacia el río Tuxpan.
Por su parte, la Secretaría de Marina confirmó que personal especializado realiza labores de saneamiento y remediación en las riberas y zonas aledañas afectadas por el derrame. Indicó que las acciones son coordinadas desde el Puesto de Mando Unificado, ubicado en las instalaciones de la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) de Tuxpan, donde participan representantes de los tres niveles de gobierno para garantizar la atención integral a la población y al ecosistema afectado.
“La Empresa Pública del Estado coordina las acciones a través del Puesto de Mando Unificado… para dar seguimiento a las labores y garantizar atención integral a la población”, detalló la Semar en un comunicado.
Asimismo, la dependencia informó que se desplegó personal y material especializado, además de que se activó el Plan Regional de Contingencias y Mando Unificado. Entre las medidas aplicadas destacan la colocación de barreras de contención en puntos estratégicos, la recuperación del hidrocarburo, el uso de sustancias químicas para dispersión y el desvío del flujo del derrame. También se realizaron vuelos de reconocimiento para evaluar la magnitud del daño y monitorear el avance de la mancha.
En redes sociales, habitantes de las comunidades cercanas compartieron imágenes y videos donde se observan amplias zonas del río cubiertas por una capa de hidrocarburo. Algunos usuarios difundieron tomas aéreas que muestran una extensión mayor a la reconocida por Pemex, lo que incrementó la alarma entre los pobladores.
La población expresó su preocupación ante el riesgo de que el hidrocarburo llegue al mar a través del río Tuxpan, lo que podría provocar un daño ambiental más severo si no se refuerzan las acciones de contención y limpieza. Mientras tanto, las autoridades federales y estatales continúan con los trabajos para evitar la propagación del derrame y mitigar su impacto en la zona.



