En declaraciones efectuadas este miércoles, Luis Rey García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana de Chiapas, reveló que aproximadamente el 90% de las 8,000 a 10,000 personas que integran la nueva caravana migrante que atraviesa México desde el 24 de diciembre, desea establecerse y trabajar en territorio mexicano.
García Villagrán describió este movimiento como un “éxodo de la pobreza” proveniente del sur de México, compuesto mayormente por individuos de escasos recursos que no han tenido recursos para pagar a traficantes de personas ni para enfrentar la corrupción en el Instituto Nacional de Migración (INM), donde se cobra por gestionar una cita.
“El ‘Éxodo de la Pobreza’ no quiere llegar a Estados Unidos, pretende quedarse en México, trabajando en lo que venga, en lo que haya. Nueve de cada diez quieren quedarse en México, pero no en el sureste”, afirmó García Villagrán en una entrevista para Radio Fórmula.
Según el activista, estos migrantes están dispuestos a trabajar en diversas áreas, ya que ingresar a Estados Unidos se ha vuelto cada vez más difícil. Explicó que estas personas, provenientes de países como Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Brasil, Colombia, Cuba, Haití y República Dominicana, están interesadas en emplearse en proyectos como el Tren Maya y el Transístmico, pero evitan el sureste de México, considerándolo una de las zonas más olvidadas del país debido a la falta de industrias.
El “Éxodo de la Pobreza” tiene planes de trasladarse de Chiapas a Oaxaca el próximo fin de semana, encontrándose actualmente en los municipios de Escuincla, Mapastepec y Tonalá.
Estos movimientos migratorios coinciden con la visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, quien se reunirá con el presidente Andrés Manuel López Obrador y otros funcionarios. García Villagrán espera que esta reunión sea atenta y solicitó comprensión hacia la difícil situación de los miles de migrantes atrapados en una coyuntura electoral y de diferencias políticas.
Tras el encuentro, se espera un pronunciamiento, pero García Villagrán insistió en que el 90% de los migrantes de esta caravana busca quedarse en México.
