Congreso de Jalisco rechaza la reforma judicial en sesión extraordinaria

El Congreso de Jalisco, con mayoría de Movimiento Ciudadano, decidió no apoyar la reforma judicial durante una sesión extraordinaria que comenzó a las 21:00 horas del jueves 12 de septiembre y concluyó pasada la medianoche.

Con 26 votos a favor y 10 en contra, los diputados de Movimiento Ciudadano, PAN y PRI respaldaron el dictamen que rechaza las modificaciones propuestas. A pesar de esta decisión, la reforma ya ha sido aprobada por 21 congresos locales, lo que es suficiente para su publicación en el Diario Oficial de la Federación y su entrada en vigor.

Los principales argumentos en contra de la reforma judicial giraron en torno a la supuesta violación de la separación de poderes, la metodología en la selección de jueces y la falta de garantías para erradicar el nepotismo y la corrupción, según los legisladores opositores.

Estados que han aprobado la reforma judicial

Hasta ahora, 21 congresos locales han dado su visto bueno a la reforma constitucional, tras sesiones en las que se analizó, discutió y votó la iniciativa. El Congreso de Oaxaca fue el primero en aprobarla, convocando una sesión extraordinaria en la que, por unanimidad, los legisladores de Morena y la oposición votaron a favor de la reforma.

¿Qué plantea la reforma judicial?

Entre las medidas clave de la reforma judicial se encuentra la renovación completa de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y del 50% de los jueces, quienes serían elegidos mediante voto popular. La primera elección está programada para el primer domingo de junio de 2025, con una segunda elección ordinaria en 2027, coincidiendo con los comicios federales.

Suspensión de la discusión en Chihuahua

En contraste, el Congreso del Estado de Chihuahua suspendió el debate sobre la reforma judicial después de recibir una orden judicial. El coordinador del PAN, Alfredo Chávez Madrid, informó que el dictamen fue retirado del orden del día para cumplir con la resolución.

Durante una manifestación de trabajadores del Poder Judicial y abogados, Chávez reafirmó que su partido no permitirá que la justicia sea controlada por intereses políticos. Diputados del PRI y Movimiento Ciudadano también apoyaron la postura de no aprobar la reforma en Chihuahua, argumentando que el procedimiento seguido por Morena es irregular y carece de sustento legal.

A pesar de la oposición en Chihuahua, la reforma ha obtenido el respaldo necesario a nivel nacional para ser promulgada.

Tensión en el Senado por la Reforma Judicial

Con la participación de 37 de los 38 senadores que conforman las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, se llevó a cabo una sesión clave en la Cámara Alta para debatir y votar el dictamen de la reforma judicial.

Los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), entre ellos Ricardo Anaya, Marko Cortés, Gustavo Sánchez Vázquez y Mayuli Latifa Martínez, mostraron cautela durante la sesión. Manifestaron su preocupación debido a la existencia de órdenes judiciales que, según señalaron, podrían detener el avance del proceso legislativo de la reforma.

El desarrollo de la sesión siguió un programa previamente acordado: primero, se realizó la lectura o presentación del dictamen. Posteriormente, los grupos parlamentarios fijaron su postura en un lapso de 10 minutos por partido, en el siguiente orden: Movimiento Ciudadano, Partido del Trabajo, Partido Verde, PRI, PAN y Morena.

Después de estas exposiciones, inició la discusión en lo general, con un mínimo de tres rondas de debate. Cada ronda contó con intervenciones de hasta cinco minutos, en las que participaron tres senadores a favor y tres en contra de la reforma.

Los miembros de las comisiones dictaminadoras tuvieron la oportunidad de presentar reservas al dictamen durante la discusión en lo general. Estas propuestas debían entregarse por escrito, respetando las prácticas parlamentarias habituales.

Al concluir las intervenciones, la presidencia de las comisiones consultó si el debate había sido suficiente. Si la mayoría consideraba que no, se abriría una nueva ronda de intervenciones bajo los mismos términos. Si la mayoría afirmaba que el debate había sido exhaustivo, se informaría a los integrantes sobre el siguiente paso.

Finalmente, tras agotar las discusiones, se procedió a votar en lo general el dictamen, junto con los artículos no reservados.