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El 28 de julio, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) anunció el despliegue de 200 agentes élite del Ejército Mexicano en Culiacán, Sinaloa, elevando a 400 el número de efectivos del Cuerpo de Fuerzas Especiales en la región. Este operativo se implementó tras la detención de Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín “El Güero” Moreno en un aeropuerto de Nuevo México, Estados Unidos, el 25 de julio, ambos considerados líderes del Cártel de Sinaloa.

Porfirio Fuentes Vélez, comandante de la Novena Zona Militar, indicó que podría surgir una disputa por el liderazgo del cártel entre las facciones de Los Chapitos, El Mayo Zambada y Aureliano “El Guano” Guzmán López, hermano de El Chapo. No obstante, afirmó que la situación en Culiacán se mantiene tranquila.

La Agencia para el Control de Drogas (DEA) de EE.UU. en su última Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas, describe al Cártel de Sinaloa como una organización criminal sin un líder central, operando bajo un modelo “paraguas” que cubre cuatro facciones cooperativas pero independientes.

Los 200 agentes desplegados recientemente forman parte del Cuerpo de Fuerzas Especiales y la Brigada de Fusileros Paracaidistas, reconocidos por su rapidez y capacidad de reacción. Llegaron al Aeropuerto Internacional de Culiacán en dos aeronaves, una de la Guardia Nacional y otra de la Fuerza Aérea Mexicana, equipados con rifles de asalto y fusiles Barret calibre 50.

El objetivo del despliegue es inhibir actividades ilícitas y garantizar la seguridad en la región tras la captura de “El Mayo” y “Guzmán López”. La Sedena aseguró que los militares realizarán tareas de disuasión, prevención y patrullajes, respetando los derechos humanos y la Ley Nacional Sobre el Uso de la Fuerza.

Hasta la mañana del 28 de julio, no se habían reportado reacciones violentas por parte del Cártel de Sinaloa. Las autoridades estadounidenses consideran la captura de “El Mayo” y “Guzmán López” un golpe significativo para la estructura del cártel, sumándose a la detención de otros líderes como Joaquín “El Chapo” Guzmán y su hijo Ovidio Guzmán López.

Fuerzas federales arrestaron al jefe de seguridad de Aureliano Guzmán Loera, conocido como “El Guano” y hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán, tras un intenso enfrentamiento en el Triángulo Dorado.

El operativo, realizado el lunes 8 de julio, se centró en la facción “Gente del Guano” en la región fronteriza entre Sinaloa, Durango y Chihuahua. La acción se desplegó luego de un enfrentamiento en Badiraguato, Sinaloa, y contó con apoyo terrestre y aéreo, incluyendo tres helicópteros. Durante el operativo, fueron capturadas cuatro personas, entre ellas Luis N, alias “El R8”.

Las autoridades identifican a “El R8” como miembro clave en la seguridad de los hijos de Guzmán Loera, conocidos como “Los Chapitos”, y líder de “Gente del Guano”. El objetivo principal del operativo era Aureliano Guzmán Loera, líder de una facción del cártel de Sinaloa, también llamado cártel del Pacífico, y uno de los principales generadores de violencia en la región.

El enfrentamiento se extendió por las comunidades de San José del Llano y El Durazno, en Durango, resultando en al menos cuatro muertos y cinco heridos, según reportes locales. Tras la detención, “El R8” y los otros tres miembros capturados fueron trasladados en helicóptero a la Base Aérea Militar 10 y posteriormente a la Ciudad de México para ser presentados ante un juez.

Aureliano Guzmán Loera es buscado por las autoridades de México y Estados Unidos por tráfico de diversas drogas, incluido el fentanilo. Enfrenta cargos en Arizona por producción y transporte de marihuana, heroína, metanfetaminas, cocaína y fentanilo. El Departamento de Estado de EE. UU. ofrece una recompensa de 5 millones de dólares por información que conduzca a su captura.

La captura de “El Chapo” y su condena a cadena perpetua en Estados Unidos desencadenaron una guerra interna en el cártel de Sinaloa entre “El Guano” y “Los Chapitos”. Esta lucha de poder ha contribuido a la fragmentación del cártel, especialmente tras las declaraciones incriminatorias de Jesús Reynaldo “El Rey” Zambada y Vicente Zambada Niebla durante el juicio contra “El Chapo”.