Marko Cortés, líder nacional del PAN, fue arrestado por la policía bolivariana mientras actuaba como observador en las elecciones presidenciales de Venezuela, según un comunicado emitido por el propio Cortés. Posteriormente, fue expulsado a Lima, Perú.
Durante su breve estancia de dos días en Venezuela, Cortés observó la grave situación del país y expresó su esperanza en que los ciudadanos puedan lograr un cambio significativo: “Existen enormes posibilidades de que el pueblo venezolano ya ponga un alto a la autocracia de Nicolás Maduro”.
Cortés denunció abusos de poder por parte del régimen de Maduro, describiendo una persecución evidente contra la oposición. “Todas nuestras reuniones tenían que ser en casas privadas, por ningún motivo podían ser en cafés o lugares públicos, porque todos se sienten observados, vigilados y amenazados”, afirmó.
En su encuentro con el excandidato presidencial Gabriel Puerta Aponte, los líderes opositores manifestaron que la intimidación durante esta elección superaba la de los tiempos de Hugo Chávez, pero mantenían la esperanza de una victoria contra Maduro.
Alejandro Moreno Cárdenas y Marko Cortés, líderes nacionales del PRI y PAN respectivamente, han criticado la encuesta de Morena sobre la reforma al Poder Judicial, calificándola de “simulación”.
A través de sus redes sociales, Moreno Cárdenas señaló que el gobierno simula apertura con una encuesta improvisada y foros sin debate real. “Una encuesta al vapor y foros para escuchar, no para debatir, son la manera en que el gobierno finge apertura en el proceso para reformar al Poder Judicial”, expresó en su cuenta de X. Además, afirmó que el PRI votará en contra de cualquier iniciativa que amenace el equilibrio de poderes y la independencia judicial.
Por su parte, Marko Cortés describió las acciones de Morena como un “circo y teatro” destinado a justificar la reforma del presidente López Obrador. “Continúa el circo de Morena con estas encuestas, es una farsa consultar a la gente sobre la reforma al Poder Judicial. Buscan validar su decisión de controlar al Poder Judicial”, declaró.
Cortés advirtió que la reforma podría resultar en “jueces carnales” y una politización extrema del Poder Judicial, ya que los candidatos serían seleccionados por intereses políticos en lugar de méritos profesionales. También criticó que las encuestas organizadas por Morena no tienen validez oficial al no ser gestionadas por la autoridad electoral. Además, sugirió que esta situación podría prefigurar la manera en que Claudia Sheinbaum gobernaría si llega a la presidencia.
Ambos líderes, tanto del PRI como del PAN, han anunciado que sus partidos votarán en contra de la reforma judicial propuesta por Morena.
La candidata de la coalición PAN-PRI-PRD, Xóchitl Gálvez, expresó su gratitud a sus simpatizantes y a los partidos que la respaldaron, aceptando su derrota frente a Claudia Sheinbaum. “Es una tendencia que parece irreversible”, comentó sobre los resultados del conteo rápido del INE.
Gálvez confirmó que contactó a Sheinbaum para felicitarla y compartió algunos detalles de su conversación: “Le mencioné que veo un México con mucho dolor y violencia, y le deseé que pueda resolver los graves problemas de nuestra gente. Reconocí el resultado porque amo a México y sé que si su gobierno tiene éxito, también lo tendrá nuestro país”, relató.
En un llamado a la unidad, Gálvez subrayó la importancia de la reconciliación nacional y describió su candidatura como un gran honor. “¡Qué viva México!”, exclamó, asegurando que continuará en la política y prometiendo: “nos vemos en 3 o 6 años”.
Acompañada por los líderes nacionales del PAN, Marko Cortés, y del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, Gálvez recibió el respaldo de estos dirigentes. Moreno emitió un comunicado oficial reconociendo el triunfo de Sheinbaum, diciendo: “A la luz de los resultados del Conteo Rápido emitido por el Instituto Nacional Electoral, el Partido Revolucionario Institucional reconoce el triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo en la elección de la Presidencia de la República”.
Xóchitl Gálvez, candidata presidencial por la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI y PRD), afirmó que Morena y sus aliados ya están sugiriendo que la oposición cometerá fraude electoral. Sin embargo, aseguró que el partido en el poder “controla prácticamente todo”. Gálvez también expresó su respeto por la decisión de Movimiento Ciudadano de cambiar su cierre de campaña, mientras que el suyo en Monterrey sigue programado para el próximo miércoles.
En un mitin celebrado esta tarde en el Parque El Palomar en Chihuahua, que contó con la asistencia de cuatro mil personas, Gálvez estuvo acompañada por la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, el líder nacional del PAN, Marko Cortés, y varios candidatos locales.
Durante su discurso, la candidata destacó que el “Plan C” de Morena busca controlar el Congreso y manipular jueces y ministros. “Las elecciones no son un trámite como en Venezuela, Cuba o Rusia. Aquí en México hay democracia y el 2 de junio vamos a votar para que México siga siendo un país libre”, declaró Gálvez. Además, criticó a Morena por insinuar que la oposición podría hacer fraude, argumentando que “ellos controlan prácticamente todo” y que “no creen en la democracia, nosotros sí”.
Al llegar a Chihuahua, Gálvez reiteró que su cierre de campaña se realizará en la Arena Monterrey con todas las medidas de seguridad necesarias. Al ser cuestionada sobre posibles ataques a su campaña, respondió que todas las acusaciones en su contra no han disminuido su apoyo electoral, sino que lo han incrementado, enfatizando su integridad y la falta de cuentas en paraísos fiscales, en contraste con la candidata Claudia Sheinbaum.
