Ante la crisis limonera en Apatzingán el gobierno de Michoacán asume el control

El corazón de la industria limonera en Michoacán late con dificultad. En medio de un paro que ya lleva tres días y afecta gravemente la producción en los municipios de Apatzingán y Buenavista Tomatlán, el gobierno estatal ha decidido tomar una medida drástica: asumir el control del Tianguis Limonero de Apatzingán. Esta intervención busca estabilizar el mercado del cítrico y, al mismo tiempo, desarticular las redes de extorsión que asfixian a los productores locales.

 

Carlos Torres Piña, secretario de Gobierno de Michoacán, anunció la decisión luego de una reunión con altos mandos militares de la 43 Zona Militar, ubicada en Apatzingán, así como con representantes de los productores y empresarios del sector. “Nosotros ofrecimos y el planteamiento es que, por algunas semanas, como gobierno de Michoacán, nos hagamos cargo de este Tianguis Limonero, para nosotros tener el control y la revisión de dónde viene la fruta, la trazabilidad de qué áreas y parcelas viene, el control de la venta, y todo eso que permita también regular ciertos procesos”, explicó Torres Piña, subrayando la necesidad de una intervención urgente.

 

Esta acción busca, en primer lugar, garantizar la seguridad de los productores, quienes han denunciado que el crimen organizado les exige hasta tres pesos por cada kilogramo de limón que comercializan. Estas extorsiones, sumadas a los bajos precios pagados por las empacadoras, han llevado a los limoneros al borde de la desesperación.

 

El paro limonero que afecta a Apatzingán y Buenavista Tomatlán no es un problema aislado. “Se mezclan varios temas”, reconoció Torres Piña. “Al ser poca la fruta que se cosecha en este periodo, el costo no es rentable, y si a esto le agregas estos elementos externos que tú señalas, por supuesto que se mezclan”. Las declaraciones del secretario reflejan la complejidad de una situación que no solo tiene un impacto económico, sino también social y de seguridad.

 

La producción de limón en Michoacán, que anualmente alcanza las 600 mil toneladas, es una de las más importantes a nivel nacional. Sin embargo, el bajo costo del producto en el estado, donde los limoneros reciben entre 7 y 11 pesos por kilogramo, contrasta drásticamente con los precios en otros estados del país, donde el mismo cítrico se vende entre 20 y 50 pesos. El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla ha señalado este factor como una de las principales causas de la crisis actual.

 

El costo de producción no es el único factor que sofoca a los limoneros. Los productores han revelado, bajo condición de anonimato, que el crimen organizado ha incrementado las tarifas de extorsión, haciendo aún más difícil su labor. Los cárteles implicados en estas actividades, según se ha identificado, son Cárteles Unidos (Los Viagras y Blancos de Troya), Los Caballeros Templarios, el Cártel de Acahuato y el Cártel de Tepalcatepec. Este último controla las extorsiones en Tepalcatepec y La Ruana, dos zonas históricamente conflictivas.

 

Ante este panorama, la intervención del gobierno en el Tianguis Limonero no solo busca regular el precio del limón, sino también cortar las fuentes de ingresos ilícitos de estos grupos. La trazabilidad de la fruta y el control de la venta se perfilan como herramientas clave en esta estrategia.

 

Aunque la decisión del gobierno de Michoacán representa un paso audaz, el éxito de la medida dependerá de su implementación y de la capacidad de las autoridades para sostener el control en un entorno dominado por la violencia y la corrupción. La intervención del Tianguis Limonero de Apatzingán es, en muchos sentidos, una prueba de fuego para la administración estatal, que deberá demostrar su determinación y eficacia frente a uno de los desafíos más complejos que enfrenta el sector agrícola en la región.

 

Los productores, por su parte, mantienen la esperanza de que esta medida sea el primer paso hacia una solución más duradera que les permita trabajar en paz y obtener un precio justo por su esfuerzo. Como señaló uno de ellos, “Lo que necesitamos es que nos dejen trabajar, que nos paguen lo justo, y que no tengamos que temer por nuestras vidas cada vez que salimos al campo”.

Martí Batres agradece invitación de Claudia Sheinbaum y espera indicaciones sobre nuevo cargo

Martí Batres, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, expresó su gratitud por la invitación de la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para unirse al gabinete ampliado. Durante una conferencia de prensa en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, Batres señaló que será Sheinbaum quien determine y comunique el cargo específico que asumirá en la Administración Pública Federal.

“Agradezco la invitación que la doctora Sheinbaum ha extendido para integrarme a su equipo de gobierno. Ella es quien definirá y anunciará cuál será mi rol. Si bien hemos conversado sobre el tema, la responsabilidad de informar recae en ella”, declaró Batres.

El jefe de Gobierno indicó que continuará en su puesto hasta el 4 de octubre y se compromete a atender tanto sus responsabilidades actuales en la Ciudad de México como las nuevas funciones que le asigne Sheinbaum. “Seguiré cumpliendo con mis deberes en la Ciudad de México mientras también me encargaré de las tareas que me indique la presidenta electa. Todo se discutirá con ella, quien nos dará las instrucciones pertinentes”, agregó.

Batres también felicitó a Claudia Sheinbaum por la confirmación de su triunfo por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). “Mis más sinceras felicitaciones para la doctora Claudia, quien, tras su etapa como jefa de Gobierno, ha sido ratificada como presidenta electa por el Tribunal Electoral. Es una excelente noticia”, concluyó.

Beatriz Gutiérrez Müller se despide de la vida pública con la presentación de su libro en el Zócalo

Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador, está a punto de retirarse de la vida pública. Antes de su despedida, presentó su libro Feminismo Silencioso en el Zócalo de la Ciudad de México.

El evento, organizado por la Presidencia y transmitido en vivo por la Secretaría de Gobernación, contó con la presencia de numerosos funcionarios públicos durante el horario laboral.

En primera fila, el presidente López Obrador y la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, apoyaron a Gutiérrez Müller en la presentación, que también fue transmitida en directo por el canal de YouTube y la cuenta de X de la Secretaría de Gobernación.

Entre los asistentes se encontraban figuras destacadas del gabinete, como Luisa María Alcalde, Rosa Icela Rodríguez, Raquel Buenrostro, y Manuel Bartlett, así como los titulares de la Defensa Nacional y Marina, Luis Crescencio Sandoval y José Rafael Ojeda. También estuvieron presentes Martí Batres, jefe de gobierno de la CDMX, y Delfina Gómez, gobernadora del Estado de México, quien además participó como presentadora del libro.

La presentación, que comenzó a las 17:00 horas, fue precedida por una serie de cánticos de los asistentes, quienes expresaron su admiración hacia el presidente y la futura presidenta.

Beatriz Gutiérrez Müller, acompañada por López Obrador, hizo su aparición ante un público entusiasta. Durante el evento, Pedro Miguel, consejero de Morena, destacó que el libro no abordaba chismes ni polémicas, sino que representaba una reflexión distinta sobre el feminismo.

Delfina Gómez, en su breve intervención, reflexionó sobre el significado del silencio en el contexto del feminismo, y elogió a Gutiérrez Müller por su contribución al debate. En respuesta, Gutiérrez Müller subrayó la importancia de escuchar en la política y expresó su deseo de retirarse de la esfera pública para vivir con la discreción que la caracteriza.

A pesar de las solicitudes de firma de libros por parte del público, Gutiérrez Müller se mostró reservada y sugirió que podría firmar los libros en otra ocasión. La presentación concluyó con la salida apresurada de López Obrador de regreso a Palacio Nacional.